Las empresas que lideran en prácticas inclusivas han logrado hasta 30% más en márgenes de beneficio económico, 28% más ingresos y el doble de ingresos netos frente a sus pares.
Según lo revelado por el informe 2024 del IILPCD, desarrollado por Éntrale, iniciativa de El Consejo Mexicano de Negocios (CMN).
De esta manera, cada vez más empresas en México asumen la inclusión laboral como un compromiso estratégico.
Adicionalmente, presentan una menor rotación laboral (1.27% en promedio entre personas con discapacidad, frente al 10% en empresas sin objetivos de retención), lo que se traduce en ahorros operativos significativos.
Estas empresas inclusivas también muestran hasta un 25% más de probabilidades de superar a sus competidores en productividad.
Además de acceder a un mercado poco explorado, el llamado mercado púrpura, con un poder adquisitivo global estimado en más de 13 billones de dólares anuales, según The Valuable 500.
Los costos de la exclusión
Este panorama de beneficios contrasta de manera contundente con los efectos de la exclusión.
La falta de inclusión laboral de personas con discapacidad no solo representa una pérdida de talento y diversidad para las empresas, sino que también conlleva un impacto macroeconómico negativo para el país.
Organismos internacionales estiman que esta exclusión podría reducir entre un 3% y un 7% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional cada año.
Esto evidencia que la inacción, además de perpetuar desigualdades, limita directamente el crecimiento económico sostenible.
Más allá de una tendencia
Estos datos fueron presentados en el evento “DEI más allá de una tendencia. Construyendo bienestar social”, organizado por Éntrale yEl Consejo Mexicano de Negocios (CMN).
Durante el evento se entregó el importante distintivo “Empresa Comprometida con la Inclusión Laboral de Personas con Discapacidad” a 35 empresas que destacan por sus políticas, acciones y resultados en este ámbito.
El reconocimiento fue otorgado por El Consejo Mexicano de Negocios (CMN), el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y la Coalición México por los Derechos de las Personas con Discapacidad (COAMEX) y la iniciativa Éntrale.
Esto, como parte del esfuerzo por transformar la cultura empresarial mexicana en un entorno más justo, accesible e incluyente.
Estas empresas inclusivas están abriendo camino hacia un México más justo, accesible y con oportunidades reales para todas las personas.
La jornada también fue un punto de encuentro entre la visión empresarial y el compromiso social.
Líderes empresariales, especialistas en inclusión y representantes del sector público compartieron aprendizajes, historias y desafíos, recordando que la transformación empieza con decisiones valientes.
Entre los ponentes destacados estuvieron Jorge Font, Jorge Rosas, Alejandra Cervantes, Karla González, Paulina Chavira, Fátima Masse y Emilio Azcárraga Jean.
Cada intervención reforzó una idea: cuando una empresa abre sus puertas a todas las personas, mejora no solo su cultura interna, sino el tejido social del país.
La inclusión laboral de personas con discapacidad no es una tendencia, es un acto de coherencia, visión y futuro.
Los avances
Con eventos como este y a través de El Índice de Inclusión Laboral de Personas con Discapacidad (IILPCD), de Éntrale y el CMN, se han promovido buenas prácticas, alcanzando un crecimiento del 188% en empresas participantes (45 en 2018 y 130 en 2024); en donde los avances son notables:
· El 95% de las empresas fijó metas de contratación y el 75% las cumplió, con una participación activa del 91% de sus líderes.
· Finalmente, la accesibilidad ha alcanzado un 88% de espacios físicos adecuados y un 71% con criterios digitales.
Éntrale ha facilitado la inclusión laboral de más de 50 mil personas con discapacidad en México, en alianza con más de 800 empresas.
En 2024, se impartieron 2,690 horas de capacitación y el 85% de las compañías formó a sus reclutadores en prácticas incluyentes.