Algunos datos de Technology Evaluation Centers (TEC) indican que entre 50 y 75 % de las empresas que no contemplan una consultoría adecuada en proyectos de aplicaciones empresariales enfrentan pérdidas económicas. Por ello, la evaluación de software no se debe considerar como un “gasto adicional”, de hecho, puede ser clave para su eficiencia.
También es importante mencionar que una evaluación de software meticulosa es determinante para que la implementación sea exitosa y los beneficios se presenten lo antes posible, generando una mejora en el Retorno de Inversión (ROI). Esto principalmente en iniciativas de adopción de sistemas de planificación de recursos empresariales (ERP).
“Entre algunas empresas, existe una falsa percepción de que la adquisición de software se puede llevar a cabo sin una evaluación previa y solo se toman en cuenta las recomendaciones o discursos de venta de los proveedores. Este es un error común entre las áreas de TI” compartió Jorge García, analista principal de BI y Gestión de Datos en TEC.
Si bien el software empresarial ofrece diversos beneficios como una mayor fluidez operativa con automatización de procesos, además de mejorar el control y entendimiento de las operaciones que permite incrementar la productividad de los colaboradores e incluso sustituir sistemas heredados obsoletos. Estos objetivos demandan un plan estratégico.
Una situación que tiene impacto a nivel global
El porcentaje de implementaciones fallidas puede alcanzar hasta 75 %, lo cual se traduce en pérdidas de capacidad operativa, competitividad, empleados, clientes e ingresos. Por ello, es importante que las empresas, sin importar su giro, realicen una evaluación previa con el apoyo de profesionales tomando en cuenta los requerimientos de cada implementación.
Es decir, es fundamental, que las empresas implementen la solución que mejor se adapte a sus necesidades particulares, desde el punto de vista de ahorros, datos de TEC indican que, al efectuar dicha evaluación se reduce el tiempo de selección hasta 50 %, esto sin sacrificar el número de proveedores considerados, además en costos dicha optimización alcanza 25 %.
“Las empresas que adquieren soluciones solamente porque el proveedor les hizo creer que su tecnología es la que necesitan, sin que verdaderamente se realice la revisión y evaluación correspondiente. Se pueden exponer a un proceso complejo de implementación donde los resultados obtenidos no pueden ser los proyectados al inicio del proceso”, finalizó García.
Finalmente, según datos obtenidos por TEC, las organizaciones que llevan a cabo una evaluación previa llegan a ahorrarse hasta 25 % o más en materia de costos relacionados con la adquisición de las aplicaciones. Esto en comparación con aquellas empresas que no realizan dicho proceso, esto es algo que puede capitalizar el canal de integración del país.
