Las temporadas altas de ofertas como el Hot Sale representan una gran oportunidad, tanto para las compañías como para los clientes, pero también para los defraudadores.
De acuerdo con SAS, a medida que aumenta la cantidad de transacciones y ventas para un comercio, también lo hacen los fraudes, lo cuales pueden incrementar hasta en un 50 % en esta época. Sin embargo, la tasa más alta de estos ocurre una vez que termina la temporada alta.
Y es que de acuerdo con un estudio de America’s Market Intelligence (AMI), América Latina es la región del mundo en la que más han aumentado las transacciones fraudulentas. Se estima que, en pagos electrónicos, estos incidentes representan una pérdida del 4.6% de los ingresos totales de los comercios.
El reto de ir un paso adelante de los defraudadores
Conforme se implementan innovadores blindajes para la prevención de fraudes, la delincuencia organizada encuentra nuevas maneras de sortearlos y desarrolla otras formas de cometer ilícitos.
Según información de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2021, en México, 15 % de la población ha reportado ser víctima de algún tipo de estafa como el robo de identidad, y la clonación de tarjetas, etc.
Por su parte, el estudio de la Asociación de Internet MX reveló que las tres principales vulnerabilidades de los internautas mexicanos son: fraude y pérdida financiera (46.5 %), suplantación de identidad (27.3 %) y robo de información (22.2 %).
Análisis de datos en tiempo real clave para combatir los fraudes del sector
Detectar anomalías en los patrones de uso de los cuenta habientes es clave para la prevención de fraudes. Sin embargo, el sector retail se enfrenta al reto de procesar grandes cantidades de información en tiempo real para generar una toma de decisión asertiva que blinde al establecimiento y al cliente ante algún fraude, pero que al mismo tiempo ofrezcan una buena experiencia de compra.
Y es que, a decir del experto, en el tema de prevención de fraudes, no todos los establecimientos implementan plataformas que permitan integrar los silos de información de las diferentes fuentes, es decir que sean capaces de vincular los datos provenientes de las tarjetas de crédito, débito, etc. y generar modelos analíticos para una toma de decisiones más asertiva. Algunos comercios analizan esto silos por separado lo cual aumenta la probabilidad de ser víctima de fraude.
Adicionalmente, es necesario que tanto los retailers como las instituciones financieras adopten herramientas como el monitoreo transaccional en tiempo real y el análisis híbrido. El primero permite revisar el historial, tipo de transacciones, montos, lugares, etc. en milisegundos y realizar un score para validar si la transacción no tiene riesgo.
Por otra parte, el análisis hibrido, enriquece la información de la transacción, ya que toma diferentes valores de los silos de datos para desarrollar patrones de comportamiento, con base en factores como: el tipo de cuentas y tarjetas que tiene una persona, desde dónde accede a su banca electrónica (app o pc), en qué momento hace consultas, etc. para determinar cualquier anomalía en las transacciones e incluso evitar robos de identidad.
En este sentido, la modernización de los sistemas y softwares de prevención de fraude para las compañías de retail e instituciones bancarias serán clave para hacer frente a la delincuencia organizada. Pero también será importante que estas herramientas permitan generar una buena experiencia para el usuario final, es decir que puedan disminuir los falsos positivos y detecten de manera certera los intentos de fraude en el momento en el que se llevan a cabo para detenerlos.