La inteligencia artificial (IA) y centros de datos (CD) tienen cada vez más una sinergia que potencia el desarrollo de uno y otro, pero también marca grandes desafíos.
Esto se da debido a la demanda de servicios electrónicos. Y se espera que se duplique en la próxima década.
Gran parte de esa infraestructura impulsa los servicios diarios y el crecimiento de la demanda proviene de la próxima generación de prestación de servicios: El mundo de la Inteligencia Artificial.
Y esta ha cambiado significativamente en los últimos años.
Dentro de los avances más relevantes es que es vista como una herramienta convencional, para la generación de texto, de imágenes e incluso vídeo.
No obstante, existe otro tipo de IA, la predictiva, diseñada para analizar los datos captados a partir del sonido, las imágenes o el video. Y entonces permite sacar conclusiones de ello.
Combinación de datos de video e IA
La IA no es sólo un impulsor del crecimiento, también es un facilitador del mismo.
A medida que los CD se expanden en tamaño y complejidad, la IA será medular al simplificar la gestión local y remota de las instalaciones.
A medida que aumente el consumo de energía la IA ayudará a encontrar nuevas eficiencias. (Se espera que la IA generativa por sí sola requiera 38 GW adicionales para el año 2028).
La tecnología existente y nuevas oportunidades
Si una cámara puede ver algo, la IA puede actuar en consecuencia.
A través del Aprendizaje Profundo, es posible desarrollar aplicaciones reactivas personalizadas que ofrezcan nuevas soluciones a problemas antiguos. O detectar nuevos problemas antes de que sea demasiado tarde para actuar sobre ellos.
Los modelos de IA debidamente formados permiten que dichas aplicaciones analíticas se ejecuten directamente en el extremo de la red. Así como dentro del hardware de la cámara en el que confían.
Posibilidades creativas para la innovación
El potencial creativo de la IA significa que las aplicaciones de las analíticas se pueden adaptar a las necesidades únicas del entorno del centro de datos.
Por ejemplo, la detección de objetos puede ajustarse para buscar elementos prohibidos como botellas de agua.
Las cámaras se pueden configurar para detectar señales visuales o, a través de sus micrófonos, señales acústicas de fallo o degradación del servidor.
Las analíticas se pueden formar para buscar peligros ambientales, como fugas. Y garantizar que el mantenimiento y la conservación sean adecuados para prolongar la vida útil del equipo.
El futuro de los centros de datos
Los centros de datos son la piedra angular de la tecnología del mañana, pero la rápida expansión de la infraestructura digital no será fácil.
Los operadores necesitan todas las ventajas que puedan obtener, ya sea ahorrar dinero o energía. O simplemente mantener las instalaciones lo más limpias, eficientes y seguras que sea posible.
Las analíticas de IA ofrecen todas estas y otras ventajas, todas como una extensión de hardware que sería necesaria para la función de seguridad. Independientemente de si se utilizaron o no analíticas.
A medida que el mundo se vuelve más inteligente, también lo hace la infraestructura digital.
Planificar nuevas actualizaciones para aprovechar al máximo los beneficios de la IA es el camino hacia un mundo más inteligente y seguro. Tanto para los operadores como para sus clientes y, lo que es fundamental, sus datos.