Actualmente, el crecimiento del sector privado depende de factores clave como la agilidad e innovación así como la responsabilidad. En este sentido, se debe tener en cuenta que dicho segmento debe lidiar con desafíos a nivel económico, tecnológico, regulaciones y de talento.
Se debe tener en cuenta, que las empresas privadas abarcan todo tipo de industrias a nivel global, ya sean familiares, de tecnología o startups. A lo que, se deben agregar los denominados emerging giants, es decir empresas con rápido crecimiento en sus mercados.
“En este sentido, la apuesta por realizar fusiones y adquisiciones sigue presente, aunque con un menor índice de grandes operaciones. Donde solamente el 30 % del sector privado busca grandes acuerdos, frente al 45 % del año anterior”, declaró Jesús Luna, socio Líder de Private Enterprise de KPMG México.
Por esto, la consultora KPMG realizó una investigación para conocer mejor los planes y estrategias de los ejecutivos de alta dirección. Donde, se dejó en claro que una de sus principales prioridades es impulsar el crecimiento del sector privado, de un modo integral y sostenido.
El documento denominado KPMG Global private company CEO Outlook reveló que se mantiene un optimismo notable, en el crecimiento de las empresas. Al menos el 80 % de los encuestados así lo mencionó, incluso ante la incertidumbre que generan los aranceles, conflictos y volatilidad económica.
“La preferencia por un crecimiento orgánico refleja contención, esto ante un entorno altamente cambiante. Donde la capacidad de adaptación pesa más que la escala, por esto la tecnología, particularmente la inteligencia artificial (IA), se consolida como una prioridad estratégica”, acotó el analista.
Durante 2026 se debe apostar por el crecimiento del sector privado
El estudio de KPMG, también mostró que el 71 % de los directivos la consideran una prioridad de inversión clave para mejorar decisiones y ser más eficientes. En relación con el crecimiento del sector privado, se destacó una mayor adopción de tecnología en específico la inteligencia artificial.
De hecho, el 66 % contempla destinar entre 10 y 20 % de su presupuesto a iniciativas de IA durante los próximos 12 meses. Sin embargo persisten desafíos como dilemas a nivel ético y regulatorio, además de sesgos, privacidad y la falta de transparencia, ya que el 61 % los reconoce como críticos.
“Con un marco más estructurado a sus compromisos sociales y medioambientales, el sector productivo construye modelos de negocio más sostenibles. Asimismo, con una gobernanza sólida se impulsa una planificación sucesoria, para así incorporar más indicadores ASG y otros aspectos clave”, señaló Luna.
Si bien el entusiasmo en el potencial de la IA está en aumento y consolidación, dicho crecimiento del sector privado requiere de una gobernanza sólida. La cual, debe estar basada en datos confiables para evitar riesgos reputacionales. El desarrollo de talento es otra área estratégica.
Finalmente, el estudio KPMG Global private company CEO Outlook subraya cómo las empresas están priorizando su enfoque hacia la tecnología. Sin embargo, persiste una brecha de talento especializado, que desacelera una adopción plena de la inteligencia artificial y esto frena su crecimiento.
“En conclusión, las empresas privadas deben aprovechar su agilidad para navegar en un entorno donde la tecnología y la sostenibilidad no son opcionales. Durante 2026, el reto será equilibrar velocidad con responsabilidad, innovación con ética, así como el crecimiento con propósito”, finalizó el ejecutivo.
