La industria de la logística ha experimentado enormes desafíos y cambios en los últimos años, para bien y para mal.
En medio de obstáculos como la escasez de chips y una crisis global de la cadena de suministro, ha habido una constante: la necesidad de una mayor transparencia y visibilidad, de extremo a extremo, en cada etapa de la cadena de suministro, lo que permite eliminar muchas conjeturas para los proveedores.
Además del beneficio para los clientes, que pueden realizar un mejor seguimiento de sus pedidos, la visibilidad ayuda a resolver una gran variedad de desafíos para las empresas de logística, desde optimización de flotas hasta ahorros de energía.
Pero un desafío clave para la industria de la logística amenaza con deshacer gran parte del progreso logrado en esta área: el retiro de la conectividad 3G.
El final del 3G
En nombre del progreso, la mayoría de los operadores de telecomunicaciones de todo el mundo están retirando sus redes 3G más antiguas como parte de la expansión en curso de las redes 4G y 5G, que ofrecen una conectividad más rápida y estable tanto para la industria de las telecomunicaciones como para las empresas y consumidores que dependen de ella para su conectividad.
El 3G existe desde principios de la década de 2000 y se está eliminando gradualmente para dejar espacio a estas redes de próxima generación. En Estados Unidos, Verizon cerró recientemente su red 3G, el último operador en los estados en hacerlo.
En Europa, la fecha límite para la extinción de 2G/3G es 2025, pero la mayoría de los operadores están muy por delante de esa fecha. 3G sólo representa el 4% y el 0.6% del tráfico de datos de red de Vodaphone y EE, respectivamente.
En México la red 5G continúa expandiéndose y los operadores planean ir apagando las generaciones 2G y 3G. Aunque, por ilógico que parezca, será la 3G la primera en ser apagada, hacia el año 2025, mientras que la 2G sufriría esta misma suerte hasta el año 2030.
¿Nuevos desafíos para la logística?
Aunque en términos generales este progreso es una buena noticia, la desaparición del 3G presenta un desafío para muchos dispositivos y aplicaciones conectados en el corto plazo.
Una gran cantidad de aplicaciones, como sistemas de seguridad, medidores inteligentes y herramientas de rastreo GPS, dependen de la conectividad 3G.
Esto se debe a que era la primera generación de la red que podía admitir dichos dispositivos y, a pesar de las ventajas de las redes de próxima generación, las señales 3G viajan más lejos, lo que significa que eran ideales para muchos casos de uso de seguimiento e IoT (Internet of Things).
La industria de la logística ha llegado a depender de 3G para respaldar sus dispositivos de seguimiento y aplicaciones que gestionan y registran el movimiento de flotas.
En su nivel más básico esto puede implicar rastrear la ubicación de los vehículos y vigilar sus rutas, pero las soluciones más avanzadas pueden ayudar a optimizar las cadenas de suministro y las flotas a escala mediante análisis avanzados.
Los casos de uso incluyen monitoreo de rutas y comportamiento del conductor, video telemática y análisis de mantenimiento. Pero ahora que el 3G se acerca al final del camino, estos dispositivos pronto dejarán de funcionar. ¿Cómo deberá adaptarse la industria de la logística?
Tecnología de nueva generación
Proveedores de tecnología como Wialon, la plataforma líder mundial de gestión de flotas, han tenido tiempo suficiente para prepararse y adaptarse. En cambio, la necesidad apremiante es que las empresas se comprometan a realizar el cambio y actualizar los dispositivos que respaldan sus flotas.
Es comprensible que muchos hayan retrasado esto mientras se centran en los desafíos actuales que enfrentan las cadenas de suministro. Sin embargo, el tiempo comienza a agotarse y, si las empresas no reemplazan pronto sus dispositivos de seguimiento, corren el riesgo de quedarse atrás.
Los dispositivos conectados a 4G disfrutan de una mayor eficiencia gracias a conexiones más rápidas, incluido un menor consumo de energía y mayores velocidades de datos.
La preocupación por la cobertura, que anteriormente mantenía la tecnología telemática y de IoT ligada a 3G, ahora está en gran medida resuelta: la cobertura 4G supera el 90% en muchas áreas y alcanza el 100% en la mayoría de los países desarrollados.
También se prevé que los costos de estos dispositivos se reduzcan a medida que sucedan más cambios de hardware a redes 4G.
Los fabricantes de hardware también están lanzando nuevos modelos de dispositivos de seguimiento de vehículos GPS que ayudan a las empresas a prepararse para la próxima migración a 4G.
Estos dispositivos pueden proporcionar posicionamiento en tiempo real, herramientas de gestión de seguridad en la conducción relacionadas y otra información de monitoreo para aplicaciones telemáticas de mayor valor.
A medida que llega el ocaso para el 3G, se abre la puerta para que las empresas de logística obtengan una serie de beneficios comerciales clave.
La implementación de tecnología mejorada puede reducir el desperdicio de energía, ofrecer nuevas funciones de gestión de flotas y promover el bienestar de los conductores.
Puede parecer obvio, pero los primeros usuarios pueden cosechar los beneficios antes, ya que los conductores aún podrán entregar bienes y servicios de manera oportuna. La adopción de la tecnología 4G y 5G promete ser un rayo de luz para la industria de la logística de misión crítica.
Por Aliaksandr Kuushynau, director de Wialon.