Para el sector productivo los proyectos de IA empresarial deberán generar rentabilidad, así como retornos de inversión (ROI) y gobernanza. Es decir, la inteligencia artificial (IA) está por entrar en un período de consolidación, lo que representa un momento clave en su adopción.
Esto después del entusiasmo, inversión acelerada y adopción masiva en diferentes sectores de la industria. Por eso, ahora la IA se enfrenta a un complejo entorno, que está definido por la presión financiera, escepticismo y ciertos cuestionamientos sobre su consumo de energía.
“A pesar de estas preocupaciones válidas, el futuro dista mucho de ser sombrío y el camino a seguir está bien definido. Así los proveedores y usuarios empresariales de IA deben asumir su papel con responsabilidad”, declaró Héctor Cobo, vicepresidente regional de SAS México, Caribe y Centroamérica.
Con dicho contexto, se pronostica que en 2026 los proyectos de IA empresarial tendrán que rendir cuentas, con proveedores enfocados en resultados. Además, se deben atender todos los dilemas éticos vinculados al uso de IA, para apostar por una adopción más responsable.
Por ello, la inteligencia artificial empresarial pasará de un alto crecimiento impulsado por las altas expectativas del propio mercado. Sin embargo, ahora la adopción de IA estará definida por exigencias operativas y financieras más estrictas, es decir una implementación integral.
Industria deberá justificar mejor los proyectos de IA empresarial
En este sentido, la firma dio a conocer una serie de perspectivas alrededor de la adopción de proyectos de IA empresarial. Las cuales están centradas tanto en ajustes estructurales, como a nivel tecnológico y organizacional, donde resalta la desaceleración en los centros de datos.
Lo cual se debe al aumento sostenido de costos energéticos y operativos, esto podría volver inviables algunas de las inversiones anunciadas recientemente. A nivel de infraestructura, se proyecta una mayor demanda energética asociada con la adopción de inteligencia artificial.
“Solamente integrando sólidos principios de gestión de datos y una inteligencia artificial que sea confiable, dicha tecnología seguirá evolucionando. Para así alcanzar todo su potencial, el cual puede generar beneficios para las personas, fortalecer a las empresas y fomentar una mayor innovación”, acotó Cobo.
Específicamente en el mercado de los Estados Unidos, los data centers van a requerir de una serie de capacidades adicionales significativas. Dicha situación se podrá extender hasta 2027 y por esto los proyectos de IA empresarial, serán determinantes dentro de toda la industria.
También se anticipa una intensificación de la carrera cuántica, que estará impulsada por los avances en hardware, conectividad y corrección de errores. Finalmente, se tendrá el apoyo tanto de inversiones del sector público como de la iniciativa privada a sus diferentes niveles.
Por Sergio F. Cara/Notipress