Hoy en día, hablar de transformación digital es tan común como tomar café en la mañana, pero ¿realmente entendemos su alcance?
Más allá de la implementación de tecnología en las áreas de una organización, la transformación digital implica un cambio profundo en el pensamiento y la cultura de las empresas.
Es emprender un viaje hacia un mindset digital y agile que redefine la forma en que operamos y nos enfrentamos a los desafíos.
Personalmente, he presenciado cómo las organizaciones adoptan tecnologías avanzadas para optimizar procesos, mejorar la eficiencia y ofrecer experiencias diferenciadas a sus clientes.
Sin embargo, la verdadera esencia de la transformación digital va más allá de la implementación de sistemas y plataformas.
La transformación digital es un cambio de mentalidad, significa abandonar viejas prácticas e incorporar la agilidad, la innovación y la adaptabilidad.
La realidad actual exige que dejemos atrás la resistencia al cambio y adoptemos una mentalidad proactiva.
En lugar de ver la tecnología como una solución aislada, debemos integrarla en el núcleo de nuestras operaciones y estrategias.
Esto implica fomentar una cultura que valore la experimentación, el aprendizaje continuo y la colaboración entre todas las áreas.
Muchas empresas han fracasado porque no hay un cambio de mindset y una metodología agile.
Término que se centra en la implementación rápida de un equipo eficiente y flexible para planear el flujo de trabajo.
De cifras para la Transformación Digital
A inicios de este 2024 hicimos un análisis de la evolución que han tenido nuestros clientes después de realizar implementaciones tecnológicas:
1.- Las grandes empresas mostraron un incremento de hasta el 31 % en la eficiencia de su gestión operativa; hasta un 26 % de incremento en su ticket promedio.
Y hasta un 36 % de incremento en sus ventas durante el primer año posterior a la implementación.
Sin embargo, aquellas empresas que para el segundo año mostraron una disminución promedio del 11.5 % en todos estos conceptos, tuvieron un patrón de factores de entre los que destacan:
a) No había un esquema de transferencia de conocimiento de los colaboradores que se iban de la compañía, hacía sus relevos.
b) Las posiciones de mayor liderazgo nunca ingresaron a las plataformas implementadas y por lo tanto no tenían conocimiento de sus alcances.
c) Cuando el bajo aprovechamiento de la tecnología fue evidente, los directivos optaron por regresar a su modelo anterior.
2.- Las empresas medianas de un promedio de 300 colaboradores a las que dimos consultoría e implementaciones tecnológicas mostraron un crecimiento promedio del 19 %:
En su eficiencia operativa, ticket promedio y ventas durante el primer año posterior a la implementación.
Y un incremento del 29.5 % para el segundo año. Los factores que estas empresas mostraron a diferencia de las anteriores son:
a) Menor índice de rotación de personal.
b) Si bien estas empresas utilizaban herramientas básicas y de bajo costo previo a la implementación, su personal y directivos ya estaban familiarizados con la digitalización de procesos.
c) Buena parte de los directivos entendía el funcionamiento de las herramientas.
d) Había un esquema de capacitación para el nuevo colaborador que se integraba a la organización.
Conclusión
Es evidente que el mindset de la compañía (directivos) es el factor más preponderante que determina el éxito de la empresa.
En TS4 Strategy, hemos observado cómo las empresas exitosas no sólo adoptan tecnologías disruptivas.
También instauran prácticas ágiles en sus operaciones diarias.
La agilidad permite a las organizaciones ser más receptivas a las necesidades del cliente, anticipar tendencias y mantenerse competitivas en un entorno empresarial dinámico.
Por Salvador Pineda, cofundador y COO de TS4 Strategy
