De acuerdo con el Reporte de Amenazas 2022 de Unit 42, de Palo Alto Networks, México se sitúa como el segundo país más afectado por ransomware en el último año, el primer lugar corresponde a Brasil. El grupo de cibercrimen con mayor relevancia en América Latina es Lockbit 2.0, ya que está relacionado con 23% de los incidentes reportados en toda la región.
“El mercado de ciberseguridad está en constante crecimiento por ello buscamos el apoyo de distribuidores, integradores, mayoristas y proveedores de servicios para crecer en conjunto. La idea es llegar a más empresas, además de apoyarlas en su transformación digital”, declaró René Hérnandez, gerentes de negocio para canal en México para Palo Alto Networks.
En nuestro país, la Ciudad de México (CDMX) es la entidad con mayor número de incidentes relacionados con ransomware, las verticales más afectadas son sector público a todos niveles, además de la industria de materiales y servicios al consumidor. Otras entidades con alto índice de riesgo son: San Luis Potosí, Michoacán, Hidalgo, Jalisco y Quintana Roo.
Pilares del programa de canal NextWave
- Capacitación: El canal debe tener el conocimiento necesario para implementación
- Innovación: Los socios deben adoptar un modelo disruptivo para el mercado
- Largo plazo: La firma busca desarrollar alianzas sólidas de amplia duración
La estrategia de negocio del fabricante está basada, en su totalidad, en la colaboración con el canal, para ello cuenta con el programa NextWave, el cual ofrece múltiples incentivos para que los miembros generen mayor rentabilidad. Entre el modelo de entrega de servicio destacan los acuerdos con Amazon Web Services (AWS), Google Cloud y Microsoft Azure.
“El programa contempla encuestas anuales con el canal para identificar áreas de mejora, adicionalmente contamos con múltiples incentivos. El plan comercial también contempla la participación de mayoristas, los cuales nos ayudan a desarrollar mejores estrategias de venta de soluciones y entrega de servicios de ciberseguridad”, agregó Hernández.
El reporte tomó en cuenta los incidentes reportados que implicaron un impacto a nivel económico, en operación de negocio de las empresas, en este sentido uno de los retos de la industria es documentar mejor los casos de ransomware, ya que en muchas ocasiones las organizaciones no reportan situaciones por temor a ver afectada su reputación empresarial.