Una de las prioridades de las empresas en AL, es la resiliencia digital basada en la innovación en la infraestructura digital. Esto, de acuerdo con la consultora de mercado IDC, dicho factor debe formar parte de la nueva cultura laboral de las organizaciones, además basarse en: optimización de operación, experiencia de usuario (UX) y aprovechamiento de datos.
De acuerdo con datos de la propia consultora, en América Latina, el sector de aplicaciones y servicios registró un crecimiento anual de 15 %, es decir está por encima de la industria de TI en general. Entre las principales iniciativas de negocio están cloud, ciberseguridad, modernización de ambientes TI, así como renovación de diferentes sistemas empresariales.
Entre las verticales de mayor adopción están: finanzas, manufactura, comercio y servicios, esto a través de iniciativas de gestión de datos, modernización de plataformas así como migración de cargas de trabajo. Todo ello enfocado a brindar una mejor experiencia de usuario, mediante la creación de aplicaciones móviles o soluciones de inteligencia artificial.
Modelo de negocio híbrido basado en el consumidor
-Factor tecnológico: Permite actualizar sistemas de sostenibilidad y eficiencia
-Impacto económico: Se espera una mayor precaución al realizar gastos
-Salud y sustentabilidad: Se buscan productos y servicios de empresas responsables
-Cambios en consumo: Nuevas estrategias de omnicanalidad y comercio electrónico
-Manufactura y almacén: Automatización, visibilidad e integración
-Distribución y logística: Mejora a través de datos y gestión para optimizar costos
Otras tendencias relevantes en la región son aprendizaje de máquina e inteligencia artificial, los cuales están orientados a brindar una mejor experiencia de compra, así como gestión de ambientes multicloud y administración inteligente de tráfico. En general se proyecta un valor de mercado de la industria de software en la región de alrededor de 17 millones de dólares.
Al aplicar inteligencia a los datos que se generan en el comercio digital, se pueden conocer mejor las preferencias del mercado y generar esquemas de aprendizaje activo basados en las emociones para brindar experiencias hiperpersonalizadas. Las cuales van desde el proceso de evaluación hasta concretar la transacción o brindar seguimiento en servicios postventa.
Al respecto de la transformación digital y comercio electrónico, la firma cuenta con una estrategia de seguimiento basada en el valor y conocimiento del usuario. En este sentido se destacó que los procesos de optimización deben ser constantes, ya que lo que no se puede evaluar no es susceptible de mejoras, a esto se suman los cambios en el mercado.